MAQUÍLLAME OTRA VEZ
Dirigida por: Guillermo Calderón. Protagonizada por: Paulina Gaytán, Ilse Salas y Regina Blandón. Género: Comedia. Drama. Clasificación: PG-13 — 2 de 5 Estrellas. Ya en Cines.
Dos amigas de la adolescencia que se habían distanciado por problemas personales de pronto se reencuentran para un trabajo en conjunto.
Ana es una maquillista que se ha quedado sin trabajo, y sin un lugar donde vivir. Pronto llega con Rita, otra amiga con la misma profesión y que se encuentra en una situación similar. Juntas comienzan a buscar trabajo hasta por debajo de las piedras. La mala suerte las persigue y el panorama no pinta nada bien. Esto hasta que, de la nada, y por suerte, Alexandra, una ex-amiga de Ana, las llama para ofrecerles un trabajo en una boda de la alta sociedad. La paga es buena así que, las chicas por fin ven la luz al final del túnel, y todo está puesto para que sus vidas ajusten el rumbo. Pero la inestabilidad emocional de Alexandra echa todo por la borda.
Aunque es una cinta que intenta abordar un tema en específico —la amistad entre mujeres— me pareció que no tiene identidad de género. Y con esto no me refiero a lo que usted está pensando, no, simplemente quiero decir que la cinta no se identifica con un género en lo particular. De pronto pretende ser una comedia (aunque falla miserablemente) y luego, sin darse cuenta, se carga para el lado del drama. Al final, como dice el dicho, el que mucho abarca poco aprieta. Y es que aquí no nos hacen reír, ni nos causan el más mínimo sentimiento de empatía hacia los personajes. No los construyen lo suficiente como para que nos interese ver qué sucede con ellos o, en este caso, ellas. El conflicto es tan tonto —por no usar otra palabra— que en realidad nada nos importa. Si se quedan con la siguiente boda o no, nos da igual.
En cuanto a la dirección, y aquí me enfoco exclusivamente en el manejo del talento actoral, me pareció que deja mucho que desear. Tenemos grandes nombres como: Paulina Gaytán, que en esta historia ni picha ni cacha ni deja batear. Que la puedes quitar enteramente de la línea de tiempo y no sucede absolutamente nada. Con todo y que es nuestra protagonista… imagínese. Ilse Salas, quién también trae trayectoria presumible, tampoco está al nivel al que nos tiene acostumbrados. Y Regina Blandón… de ella no puedo decir mucho pues, actúa como Regina Blandón y no sabe estar en otro tono.
En cuanto a la imagen, es la típica de cinta mexicana de medio pelo, de esas que no puedes adivinar donde se gastaron el dinero, pero puedes asegurar que no fue en la calidad de la producción. El lenguaje de cámara es de lo más simple, con todo y que intenta proponer un modo de encuadres al estilo fotografía de retrato, pero que no hacen armonía con el resto del metraje.
Tengo que ser muy sincero: yo la sufrí. A los veinte minutos de que no pasaba nada ya me quería salir de la sala. Y conforme fue pasando el tiempo simplemente me tuve qué forzar a terminarla. Fue como estar estancado en el limbo.